Donald y Melania Trump: Ocho aspectos que debes considerar para no ser como esta "pareja feliz"

Mientras hay parejas que nos inspiran, otras nos enseñan las cosas que no debemos imitar JAMÁS. ¡Entérate de qué no debes tener en tu relación!

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Después de disfrutar durante ocho años de la dulzura incomparable que irradian los Obama, ha llegado a la Casa Blanca un nuevo presidente a la cabeza de Estados Unidos, y con esto también, una nueva familia presidencial, por lo que cabe preguntar ¿qué se espera de este nuevo matrimonio? Dejemos de lado la política y la controversia con la que Donald Trump logró fundar su carrera a la presidencia, y centrémonos un momento a hablar de lo que esta nueva pareja representa, ya que a simple vista podemos apreciar que no están ni cerca de derrochar la misma gracia que sus antecesores.

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Lo cierto es que hay que aprender de los errores, es por eso que esta vez queremos que tomes nota y revises ejemplos de las situaciones en las que Donald y Melania fallan en ser una “pareja feliz”. Vamos a ver cuáles son estos pequeños grandes gestos que marcan la diferencia entre una relación funcional y una destinada al fracaso.

Aprovecha de conocer Cómo hacer feliz a tu pareja. ¡Sigue estos simples gestos!

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Créditos: Cordon Press

1. La importancia de la seducción

Sabemos que las relaciones implican de antemano una cuota de atracción y enamoramiento, pero para muchas parejas, este factor suele perderse en el camino. Nuestro consejo es que nunca dejes de avivar la llama de la pasión y esforzarte por poner lo mejor de ti misma para que la relación tenga esa “chispa” que no puede dejar de faltar.

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2. Fingir no sirve de nada

Cuando las luces del espectáculo se encienden, Donald y Melania aparentan ser un par de recién casados. Mira tan solo esta fotografía capturada en el acto de apertura de la legislatura, pues a simple vista aparenta ser todo miel sobre hojuelas ¿verdad?, sin embargo pareciera ser parte de una farsa, pues cuando se olvidan por un segundo de las cámaras se les ha visto con expresiones de enfado, desagrado e incluso desprecio. Si tomamos en cuenta que nuestro lenguaje corporal dice más que nuestras palabras, podemos deducir que algo malo está sucediendo cuando el show mediático de los Trump se acaba.

3. Compartir protagonismo

Melania Trump siempre destaca por su belleza, su buen gusto a la hora de vestir y sus acertadas opciones a la hora de lucir radiante y a la moda, pero pareciera que para Donald Trump su mujer es solo eso… “algo” bonito. Cada vez que el magnate se muestra enfático y a la cabeza de sus discursos, Melania está a su lado como un factor de apoyo que más bien se visualiza como un ente pasivo. Esta situación ha sido un pilar clave en la discusión mediática que se pregunta por qué la señora Trump no se hará cargo de cumplir con el rol social activo de primera dama. Compartir los triunfos y el protagonismo no tiene nada de malo, y eso es algo que los Obama nos enseñaron muy bien, ¡lástima que al parecer no sea lo mismo con los Trump!

4. No te conformes

Si alguien es capaz de romper tu sonrisa como Donald lo hizo con Melania en esta ocasión, de seguro te encuentras en la relación equivocada. Está bien, todos tenemos momentos de enfado y debemos controlarlos, pero ¿qué puede ser tan terrible como para que en una milésima de segundo tu sonrisa se transforme en un puchero? Puede que la primera dama no lo haya notado, ¡pero las cámaras siguen grabando, aunque no las veas!

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5. Cuando la química lo es TODO

Pareciera que para el matrimonio Trump, la química es solamente una rama que vieron en el colegio. Las acciones expresan mucho más que mil palabras, y en este caso la frialdad con la que se tratan ambos solo me hace pensar que se trata de un par de cubitos de hielo en una relación. Tal vez por los nervios de la situación o el hecho de que realmente algo anda mal, debemos decir que esta diferencia se nota aún más en contraste con los Obama, cuando cariñosamente Barack besa la mano de su amada esposa Michelle.

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6. En las buenas y en las malas

Si hay algo que se le puede conceder a Melania, es que ha sido un fiel apoyo para Donald Trump, ya que, aunque su rol se reduce a estar simplemente a su lado (literalmente) siempre apoyando, aunque sea en silencio y con su simple presencia. ¿Cuál es el problema? Suele pasar que cuando esto no es algo recíproco, puede ser nocivo para la relación, solo dar y nunca recibir, pues siempre es mejor compartir los triunfos, así como también las penas y las alegrías. ¡Abajo con el egoísmo! 

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Continuando con este punto de la reciprocidad, podemos notar que muchas veces Melania es puesta en segundo plano en cosas que parecen tan pequeñas y simples que causan revuelo en Internet. Su expresión triste y vacía, al lado de su esposo, causan tanta conmoción y odio por el magnate Donald Trump, que muchas veces se le ha visto en alguna situación en la que nos da la impresión de que quisiera ser rescatada. Tanto así que se ha creado el hashtag de #FreeMelania como una “campaña” para liberarla de las garras de Trump.

7. Cuidar a tu pareja y los mínimos detalles

Si hay algo que ha causado revuelo durante los últimos días, fue durante el comienzo de la investidura cuando Donald Trump dejó a su esposa como una “mujer florero” ante a los medios. Mientras él bajaba del auto, como si anduviera sin compañía y solo él importara, su esposa bajaba del auto sin ningún tipo de ayuda, mientras sostenía un paquete de regalo para los Obama.

¿Cuál es la enseñanza? No traten a sus parejas, ni se dejen tratar, como un ser viviente que no importa, menos en asuntos tan importantes como el que vemos ahora. No se trata de caballerosidad, sino que de respeto mutuo, así que toma nota y no te dejes tratar como si no importaras.

8. El dinero no hace la felicidad

Melania Trump tiene todo, literalmente. Con esto me refiero a que incluso puede tener el más fino desayuno con diamantes, incluso más real que el de Audrey Hepburn. El dinero no compra la felicidad y la belleza tampoco. ¿Acaso piensas que él se hubiera casado con ella si no fuera increíblemente bella? Pues no, y esto de seguro es mutuo. Poder y hermosura son una buena combinación en teoría, pero nunca son factores que nos llevan hacia la felicidad sincera. Incluso después de prácticamente conquistar el mundo, Donald Trump y Melania no parecen tan contentos como tal vez deberían. ¡El amor no está hecho de billetes con la cara de Benjamin Franklin!

Ahora ya lo sabes, las malas experiencias -propias y ajenas- tienen mucho que enseñarnos, pues aunque la búsqueda de la felicidad pareciera ser toda una epopeya, a veces es más fácil de lo que parece. Desecha estas situaciones de tu vida y verás que una relación saludable siempre está al alcance la mano de quienes están dispuestos a amar. Descubre Cómo ser una pareja feliz. ¡Sigue estos puntos!y en caso de que no contribuya a nada, simplemente, ¡huye!

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