Por muchos años, la primavera ha sido la preferida por los novios para celebrar su matrimonio. Lo romántico de las flores, los colores de la naturaleza, la agradable temperatura y los suaves rayos de sol, hacen suponer un escenario perfecto, sobre todo, cuando la locación elegida para la ceremonia y/o celebración, es en exteriores.
Hace ya algunos años, como ya sabemos, la naturaleza ha sucumbido a los avatares del calentamiento global y el invierno se alarga, la primavera se atrasa y así sucesivamente, hasta confundirnos hasta el extremo de no saber ni qué vestir al levantarnos. Pues bien, la organización de las bodas, no está ajeno a este fenómeno, por el contrario, se ven seriamente afectadas, cada una de las decisiones que se vayan tomando en el transcurso de la planificación; así es que llegó la hora de empezar a replantearnos, toda vez que fijemos fecha de matrimonio y considerar este factor tan importante y que se hace cada año más evidente.
1. Encarpados y paraguas, en caso de que los pronósticos del tiempo de los días previos al evento, anuncien lluvias para el día D.
2. Estufas, fogones y/o mantas para los invitados, si es que el clima invernal prevalece hasta esos días.
3. Sombrillas para ubicar en los sectores sin sombra, o considerar un stock de sombrillas individuales para los invitados.
4. Otro tema a considerar y no menos importante, es que el mercado que conforman los proveedores de servicios especialistas en bodas, considera estos meses como temporada alta, ya que como señalé al principio, históricamente en estas fechas se agendan la mayoría de los matrimonios; todo esto ha definido un costo mayor de dichos servicios, justamente en primavera; por lo que sería muy bueno considerar meses como marzo, abril, incluso mayo, como alternativa para fijar fecha de matrimonio; asegurándose días de sol aún estivales y mejores tarifas.
5. Para las parejas más tradicionales y que prefieren no correr estos riesgos climatológicos, siempre siguen siendo buenas opciones, principalmente en las celebraciones nocturnas, un lindo y elegante salón de un Hotel o aquellos salones diseñados especialmente para este concepto, y por qué no, un atractivo encarpado que cree una atmósfera combinada entre salón y jardín. Todo es cosa de gusto, iniciativa y presupuesto!
Entonces, si aún insisten en entregarle el día más importante de sus vidas a los bipolares días de septiembre, octubre y noviembre, no dejen de tomar en cuenta estos puntos esenciales para mantenerse protegidos del loco clima.
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