Museo El Chicó, magnífico ejemplo de la arquitectura rural del siglo XVIII, formó parte de la hacienda El Chicó y fue donada por doña Mercedes Sierra de Pérez a la Sociedad de Mejoras y Ornato de Bogotá. Es muy conocida la construcción amurallada que se levanta sobre la carrera séptima y la valiosa colección de obras de arte y antigüedades de diferentes períodos históricos, particularmente de los siglos XVIII y XIX. Sus espaciosos salones acogen óleos, esculturas en madera policromada y dorada, miniaturas, mobiliario, cristales de Bohemia, Venecia y Baccarat, espejos, cerámicas holandesas, enseres y utensilios.
Dispone de salones para la realización de eventos sociales como Matrimonios y recepciones privadas entre otras de una hermosa capilla para la ceremonia religiosa. Posee parque infantil, amplios jardines y arborización de pinos y cipreses ideal para realizar una boda campestre el en corazón de Bogotá. Recientemente se han plantado numerosas especies nativas como nogales, robles, acacias sabaneras y palmas de cera del Quindío haciendo de este lugar un oasis en plena capital.
En este lugar, mi futuro esposo me pidió que fuéramos novios. Creo que es el lugar perfecto para casarnos.
Un sitio muy lindo con unos jardines preciosos. Los salones muy bien cuidados y dotados de lo necesario.
Alquilamos la capilla y lo único que anotaríamos es que el museo facilite un TV para que las personas que no alcanzan a estar adentro, puedan ver la ceremonia.