Generalmente, cuando llega el día del matrimonio, los nervios en los novios crecen lo suficiente para generar estrés y mucha tensión. Asimismo, la novia, al ser la persona que se lleva la mayor atención, sentirá una sobrecarga de responsabilidades, entre las que destacan el cuidado de todos los detalles del matrimonio, sumándole a esto, el cuidado de su imagen, su look nupcial, maquillaje y vestido, entre otros.
Para este último, los cuidados deben ser mayores, ya que el vestido correrá el riesgo de estropearse durante todo el día. Recuerda que se trata de la pieza clave de la boda, esa que acaparará todas las miradas, además de ser una prenda delicada, que en su mayoría está confeccionada en telas suaves y claras. Por ese motivo, te daremos consejos útiles y apropiados para que puedas cuidar tu vestido durante tu matrimonio y evites manchas o cualquier otro tipo de contratiempos.
- Usar vestidos ‘doble look’
- Cuidar el largo del vestido
- Durante la preparación de la novia
- Considerar las condiciones climáticas
- Contar siempre con…
1. Usar vestidos ‘doble look’
Si eres una clásica novia princesa y sueñas con un vestido pomposo, grande y de falda voluminosa, tus riesgos a mancharlo son mayores debido a que este tipo de vestidos pueden chocar con cualquier cosa que se encuentre a tu alrededor. Sin embargo, te recomendamos la opción de llevar dos vestidos en uno o vestidos transformables. Es decir, aquel que te permita hacer tu grandiosa entrada al caminar al altar, vivir la ceremonia, y hacer tu primer baile, usando tu vestido estilo princesa y, posteriormente, transformarlo en un vestido más “cómodo”, más estrecho y, por qué no, más corto. No olvides que el hecho de poder moverte con comodidad te da mayor libertad y seguridad, por lo que el riesgo de arruinar tu vestido será menor.
Esta clase de vestidos te brinda muchas ventajas. Una de ellas ya te la mencionamos, y como siempre decimos, la comodidad, ante todo. Además, se pueden transformar fácilmente, dándote movimiento y mucho estilo. De igual manera, si eres una novia arriesgada e innovadora, puedes usar pantalones para tu estilismo. Queda bien, es chic, es diferente y, además, te ofrece menos riesgos.
Por último, nadie más apropiado para darte recomendaciones para el cuidado de tu vestido que un experto. Ya sea quien haya confeccionado tu vestido, la persona que te lo haya vendido y conozca sobre telas, tu amigo diseñador, etc. Busca los consejos y tips que ellos tengan para ti, que de seguro serán muchos, y confía en las personadas adecuadas. No te dejes llevar por recomendaciones de personas que “vieron trucos en Internet” sobre cómo quitar las manchas en vestidos. Asegúrate que los tratamientos sean reales y efectivos. De lo contrario, podrás terminar con tu vestido de novia hecho un verdadero desastre. ¡No te arriesgues!
Paula Díaz es una diseñadora especializada en vestidos de novia. Su experiencia de más de 12 años la hace gran conocedora de todo lo que a la moda nupcial se refiere. Apóyate en personas de gran calidad como lo es esta diseñadora para poner en sus manos el arduo trabajo de crear tu vestido perfecto. Con estilo original, romántico, glamuroso, moderno, vintage; Paula va a resaltar tu feminidad al máximo y te hará lucir como una novia de ensueño.
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2. Cuidar el largo de tu vestido
Sabemos que las novias prefieren los vestidos largos y la sensación que le brindan estos. Y es cierto, los vestidos largos entran en el podio de los más consentidos por todas y todos. Sin embargo, son los que corren mayor riesgo de ensuciarse o mancharse, ya que entran en contacto directo con el piso; sobre todo cuando son vestidos muy largos o con colas. Lamentablemente, muchos de ellos se convierten en limpiadores del piso y terminan hechos un verdadero desastre.
Si para ti no es un tema importante que tu vestido termine arruinado y solo quieres disfrutar tu matrimonio y fiesta, no hay problema, puedes llevar un vestido larguísimo, con cola y demás y no tener preocupaciones. Pero para aquellas novias que alquilaron el vestido o desean guardarlo como recuerdo para donarlo o venderlo posteriomente, etc., el tema de arruinar su vestido es impensable. Por eso, nuestra recomendación es buscar aquellos que, junto al calzado, no toquen el suelo. Una opción sería hacer un doblez de algunos centímetros en el caso que el vestido sea largo. Déjalo alrededor de 2cm por encima del nivel del suelo, siempre y cuando uses tacos. De esa manera, no tocará el piso y no correrá riesgo de ensuciarse o romperse.
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3. Durante la preparación de la novia
Uno de los momentos más importantes a la hora de cuidar el vestido es durante la preparación de la novia, justo antes de la ceremonia. Para el día de la boda, las novias acostumbran a usar cremas y todo tipo de cosméticos para lucir una piel perfecta. Pues bien, todos y cada uno de estos productos deben ser aplicados con mucho cuidado. Debes dejarlos secar y adherirse bien a tu piel, y cerciorarte que no transfieren ningún tipo de color. Lo mismo ocurre con el maquillaje. Ciertamente, te maquillarán completamente y luego te pondrán el vestido. Sin embargo, si piensas que necesitas retocarte, pídele a alguien que lo haga por ti y cubre el vestido con otra tela para que no caigan sobre él residuos o polvos propios del maquillaje.
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También debes tener cuidado en usar productos líquidos en spray como perfumes, fijadores de cabello, desodorantes, entre otros. Aplícalos antes de colocar el vestido, nunca después. Por si no lo sabes, estos productos contienen químicos que pueden manchar tu vestido.
Asimismo, y aunque cueste más trabajo, evita los abrazos y muestras de cariño antes del matrimonio. Sabemos que tus familiares estarán emocionados al verte regia vestida de novia. Pero, sobre todo con las mujeres, debes tener cuidado que no te manchen con su maquillaje. No te preocupes, luego de la ceremonia, todos los abrazos y cariños serán bienvenidos. Pero de momento, es mejor evitar tener que llegar al altar con una mancha casi imposible de limpiar de base de maquillaje, labial o cualquier otro cosmético.
Como último riesgo en este apartado tenemos el transporte hacia la ceremonia. No importa cuál sea, lo mejor será que vayas sentada en la parte de atrás, donde generalmente tendrás más espacio. Cuando vayas a bajar del auto, asegúrate de que la falta o cola no queden atrapadas con la puerta y puedan mancharse.
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4. Considerar las condiciones climáticas
El clima es un factor que puede afectar no solo a tu vestido, sino a toda la celebración en general. Cuando un matrimonio se celebra al aire libre los riesgos son mayores, por lo que debes estar preparada a eventos como lluvia, humedad, o excesos de calor. Nuestra recomendación es que cuentes con toldos o carpas donde puedas resguardarte de la lluvia, o disponer de sombrillas, para ti y para los invitados.
Una de las razones por las cuales un wedding planner es tan importante a la hora de organizar un matrimonio es la de ayudarte con la sobrecarga de detalles que debes considerar. Cecilia Flatow Weddind Planner conoce cada una de las etapas a llevar a cabo en la planificación de los detalles de cualquier estilo de matrimonio. Sus más de 13 años de experiencia la hacen una aliada y profesional ideal para acompañarte en este largo camino. Nunca dudes en confiarle a los mejores expertos la realización de tu boda, de esa manera los resultados que obtendrás serán sencillamente únicos y soñados.
5. Contar siempre con…
¡El famoso kit de emergencia! Porque como bien dice el dicho, es mejor prevenir que lamentar. Y cuando eres novia y debes estar regia durante todo el día, mucho más. Aunque los evites, los riesgos estarán y los accidentes pueden ocurrir. Por eso, ve preparada con los artículos indispensables para sobrevivir a cualquier eventualidad con tu vestido. No olvides incluir quitamanchas habituales como lo son: sal, bicarbonato, agua oxigenada, detergente o productos específicos para este tipo de accidentes. Además, lleva contigo también toallitas húmedas que pueden ayudarte a combatir ciertas manchas.
Sabemos que son muchas las cosas que debes tener en cuenta para mantener tu vestido en buen estado. Sin embargo, consideramos que vale la pena. Recuerda que estamos hablando de la pieza principal de toda novia y de su más preciado tesoro para ese día. Así que, si deseas cuidarlo, no dudes en seguir las recomendaciones que hemos dejado para ti.
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