Se conocieron trabajando juntos en la misma empresa, ambos perfeccionistas y trabajólicos. Un día él la invito a almorzar y poco a poco esa relación de compañerismo fue transformándose en algo más que una linda amistad. Después de solo 6 meses de relación, la vida los sorprendió con una pequeña personita, Agustina.
A los dos les encanta viajar, salir con amigos y disfrutar. Comparten el amor por la comida, son muy buenos probando cosas nuevas y lugares nuevos, teniendo preferencia por el sushi y la carne. Ambos también son muy distintos, lo que le gusta a maca es muy probable que no le guste a Felipe, pero siempre intentan tener un punto en común que es la casa, pasar tiempo en su hogar.
En septiembre del 2017 viajaron a Brasil con la pequeña Agustina de 1 año y 8 meses, estaban en la zona de piscina de niños mientras Agustina dormía y ellos descansaban plácidamente en sus respectivas reposeras. De pronto, Felipe le pasó una carta a Maca la cual relataba toda su historia de pareja, fue tan emocionante que Macarena lloró desde la primera página. Entre muchas cosas, él le decía que quería pasar toda la vida con ella y le pedía que al terminar de leer la carta cerrara los ojos y recordara el momento que la había hecho más feliz, para luego abrirlos y encontrarse con Felipe arrodillado en frente de ella con el anillo en la cajita. Más tarde, el novio confesó que su idea inicial era haberle pedido matrimonio en una cena en uno de los restaurantes del hotel, pero con los nervios no se aguantó… ¡Muy romántico!
“Yo noté que estaba nervioso desde que comenzamos el viaje, pero nunca me esperé que me iba a pedir matrimonio […] Ese fue nuestro momento emocionante porque fue muy privado, muy íntimo, independiente que había gente en el resort en todas partes, pero fue como muy lindo porque fue una cosa entre nosotros dos, fue maravilloso.” (Macarena, 2019)
La organización de su matrimonio en Concón fue un tanto caótica porque Felipe se estaba cambiando de trabajo y ellos al volver de vacaciones se mudaron de casa, entonces recién empezaron a organizar todo en marzo. Por esa razón pensaron en hacer algo pequeño de entre 40 y 60 personas, quizá un almuerzo con toda la familia. A Macarena no le interesaba si se casaban por la Iglesia, pero para Felipe sí era importante, por lo que desistieron del plan de ceremonia simbólica y/o solo civil.
Fijaron rápidamente una fecha para su boda civil, el 16 de julio, que llevarían a cabo en la sala de eventos del edificio donde viven los padres de Felipe. Contrataron a la misma banquetera que tendrían en la celebración de su matri religioso y así pasaron un muy buen día, donde compartieron con sus familias y los mejores amigos de cada uno.
El matrimonio religioso sería el 13 de octubre, un fin de semana largo que permitiría que los amigos de ambos que residen en otras regiones y países pudieran asistir. Si bien pensaron realizarlo en un centro de eventos en Concón, prefirieron quedarse con la opción de hacerlo en la casa de Mantagua de Felipe, encarparla y así lograr hacer algo sencillo, campestre y sin restricción de horarios. Como a ellos les encantan los asados y las reuniones familiares, la idea era hacer algo de ese estilo.
Los partes del matrimonio los hizo la misma novia, quien, habiendo estudiado diseño de modas en Buenos Aires, tenía todas las herramientas para crear y diseñar. Fueron invitaciones online que mandó por correo a cada pareja, incluyendo un mapa que los redireccionaba a Waze o a GoogleMap para que no se perdieran. Fue una muy buena idea con la que no solo economizaron, sino también cuidaron del medio ambiente.
Preparación de los novios
Llegado el día del evento, Macarena se alistó en su departamento en Concón en compañía de su mejor amiga Aylin Junggeburth que venía desde Buenos Aires a la boda. Fue muy especial e importante que su amiga de Buenos Aires hubiese podido asistir, no habiéndola visto en cinco años, fue muy importante tenerla presente. Ella es una amiga con la que tienen una conexión increíble, siendo amigas del alma independientemente de la distancia.
“Que ella pudiera venir y dejar todo lo que tenía que hacer por estar ese día en mi matrimonio también fue muy especial.” (Macarena, 2019)
El tocado que lució fue hecho con flores vintage y perlas en Santa María Tocados, un toque perfecto que combinaba con cada detalle de su look. La empresa fue muy atenta y flexible a todas las peticiones de la novia, además realizar un trabajo detallista y minucioso con precios muy asequibles.
Macarena se compró una pequeña cruz dorada en Zoui Joyas que combinaba con el color de su vestido. Sus aros fueron unas perlas de río de su suegra, que en el fondo funcionó como “lo prestado”. Los anillos de matrimonio fueron encargados a un joyero amigo del papá de Macarena de la Joyería Dharma ubicada en Viña del Mar. El trabajo fue muy personalizado, incluyendo la grabación en las argollas.
El vestido de novia, de cuello redondo, cintura media y toques dorados fue hecho por Soledad Peña, siendo lejos la mejor decisión. En la búsqueda del diseño ideal se probó miles de vestidos, revisó en la web una infinidad de opciones, nuevos y usados, hasta que a Macarena le gustó el vestido de una amiga que había diseñado Soledad Peña y así llegó a ella.
“Mi primera impresión fue maravillosa, fue como una amiga, nos sentamos a tomar té y conversar, y lo que menos hablamos fue del vestido porque nos caímos bacán. Entonces de verdad fue un proceso rico, donde ella me iba diciendo lo que encontraba que era mejor para mí…” (Macarena, 2019) Es una profesional muy talentosa y preocupada que a medida que Macarena le iba pidiendo ajustes al vestido, ella los realizaba mientras la novia se probaba el vestido, creando y haciendo al mismo tiempo y en el mismo momento.
Para los zapatos, la novia siempre había soñado con tener unos Shoemaker incluso para el día a día, por eso no dudó en realizar con ellos su calzado de novia soñado. Ellos suelen trabajar con una horma una talla más grande de lo habitual, por lo que Macarena fue a medir su número y luego los encargó. A las dos semanas recibió en su casa en Concón el pedido exactamente como ella lo había solicitado, unos zapatos preciosos de color dorado que hasta el día de hoy usa.
Su ramo de flores fue un regalo de su amiga Dora Oyarce que tiene la florería De Amor Chile. Macarena le dijo las flores que quería incluir y sus colores, predominando los pasteles con el rosa vintage, un tono aparentemente desteñido/pálido. Un ramo elegante y al estilo de la novia.
Felipe se arregló en la casa de sus padres junto a su hija Agustina. Su traje azul, con humita y suspensores lo encontró en el mall, en la tienda Van Heusen. El único ajuste que le tuvo que realizar fue la basta, ya que le quedaba perfecto ¡como hecho a su medida! Completó su atuendo con unos zapatos color café claro Guante muy cómodos.
Ceremonia y sesión de fotos
La ceremonia fue en la iglesia Nuestra Señora de las Mercedes en Concón. Macarena se veía hermosa, esa mirada inconfundible denotaba una inmensa alegría de estar casándose con el hombre de su vida y rodeados de todos aquellos amigos con los que quería estar y celebrar tan bello evento.
Cuando iban entrando a la iglesia con su papá, Agustina estaba con sus primas de 9 y 10 años jugando, pero en cuanto los vio entrando empezó a llamarlos, siendo súper emocionante. Lo mejor es que quedó grabado en el video matrimonio para así revivirlo por siempre.
“Uno de los momentos más especiales fue entrar con mi papá a la iglesia del brazo, eso es algo que voy a atesorar para toda la vida…” (Macarena, 2019)
Una vez casados, Macarena y Felipe se miraban con total alegría y complicidad, mientras alzaban sus brazos de felicidad y les caían una infinidad de papelitos de colores celebrando que ya eran marido y mujer.
“Hay cosas que me emocionan cuando miro para atrás, pero más allá de por un momento en particular, es por todo, es por el conjunto de cosas. Estar acompañados de nuestros seres queridos en un momento tan hermoso de nuestras vidas es algo que no se olvida más…” (Macarena, 2019)
A Macarena le encantaba el estilo de fotografía de Philip Mundy, quien además trabaja con el videógrafo Eliott Esteban. La novia conocía desde antes a Eliott, ya que es hermano de una excompañera de colegio, por lo que cuando supo que Elliot trabajaba con Philip pensó que realmente sería una dupla espectacular, ambos muy talentosos y profesionales. Además, como a Maca le gusta mucho la fotografía, intervino en muchas ocasiones para lograr el resultado que ella esperaba. De la totalidad de las fotos que los novios recibieron, pudieron elegir las que más les gustaban para el producto final.
Celebración
La decoración floral estuvo a cargo de Edith de la florería Voilà, encargándose de toda la decoración, incluso en la zona de la banquetería, y fue sencillamente espectacular, contando con columpios, floreros, lámparas colgantes, la mesa de postres llena de maseteros impactantes… Se juntaron previamente para definir colores y flores, y ella demostró total conocimiento, quien incluso pudo determinar el estilo de flores de Macarena, quien buscaba una decoración colorida y alegre, donde hubiese contraste de tonalidades y que al mismo tiempo se viera elegante.
Encarparon con Carpas Bellenger, una empresa muy flexible y profesional, muy recomendada. Y contrataron al saxofonista Jorge Manzano que tocó en el cóctel, romantizando aún más el ambiente y entreteniendo a todos los presentes.
La Banquetera Probarte que trabaja junto a la florería fue sencillamente excepcional, los novios fueron agregando varias cosas en el camino y la banquetera se adaptó sin problemas, ofreciendo comida muy rica y mucha variedad incluso en los tragos preparados. Dieron un muy buen servicio, con un personal muy amable y a un muy buen precio.
“…nuestra prioridad era que los invitados comieran rico y así fue, en el trasnoche tuvimos cordero al palo y una estación de embutidos criollos que a los invitados les encantó…” (Macarena, 2019)
Para el vals estaban muy nerviosos, habían practicado mucho porque la tía de Macarena baila en un folclor, entonces ella les había enseñado el vals y los pasos, pero estaban tan nerviosos que el día del matri se entregaron a que simplemente les saliera lo más natural posible, pero no aplicaron nada de lo que habían practicado. ¡Una anécdota más para reír!
Finalmente se presentaron con el tradicional vals “El Danubio Azul” que, si bien no salió como en los ensayos, quedará por siempre como su primer baile de recién casados. La canción que más los representó y que utilizaron en su video de preboda y del inicio del tráiler fue “The One” de Kodaline. Hasta el día de hoy cada vez que Macarena escucha esa canción se emociona porque de alguna manera cuenta la historia de su amor, donde ocurra lo que ocurra siempre van a volver al centro que es su familia, la Agu, fruto de su amor.
Avcorp Eventos se encargó de la música, con Pato tuvieron una conexión muy buena, él fue siempre muy flexible ante los cambios y la música estuvo demasiado buena, el DJ fue realmente muy profesional. Las pantallas gigantes con pedestal las arrendaron en Becaro, ellos instalaron y desarmaron todo, brindando un muy buen servicio.
Una de las sorpresas que tuvieron en la fiesta fue la máscara a cargo de Avcorp Eventos, que llegó en un auto que se estacionó en la mitad del pasto. Nadie entendía qué pasaba y de repente apareció la máscara, luego de esta interrupción la fiesta llegó al cúlmine de la diversión, no podían parar de reír, bailar, jugar, tomar y disfrutar.
La cabina fotográfica Soy de papel instaló una cámara profesional donde las fotos salían nítidas, con una puesta en escena de la cabina muy buena y con un libro personalizado con los nombres de los novios y sus colores. Ellos también se encargaron del cotillón, que fue muy bueno, con variedad de máscaras y gorros. También tuvieron el marco gigante de Instagram que mandaron a hacer y con la que los invitados se sacaban fotos.
“Y llegar a esa instancia donde de verdad estaban todos nuestros amigos, los amigos más cercanos, inclusive unos amigos que Felipe no veía hace mucho tiempo que venían de otros países, fue súper emocionante. Es que eso es, el haber compartido con las amistades que uno atesora y que no puede ver todos los días…” (Macarena, 2019)
Para los regalos de los invitados, optaron por unas cajitas en forma de pirámides del mismo color de las flores fucsia con doradas, además tenían una cinta arriba y rellenas con chocolate. La Chocolatería BIR de Viña del Mar se encargó del relleno con un chocolate 80% cacao y por dentro café, siendo ellos mismos los que rellenaron cada cajita.
“…en la hora del postre pasaba por las mesas y nadie tenía su chocolate, todos se lo habían comido, cosa que me llenó el alma porque dije ¡ohhh a todos les gustó!” (Macarena, 2019)
¡Muchas felicidades por su precioso matrimonio y su bella historia de amor!
Maquillaje: Aylin Junggeburth | Tocado: Santa María Tocados | Cruz dorada: Zoui Joyas | Anillos de matrimonio: Joyería Dharma | Vestido de novia: Soledad Peña | Zapatos novia: Shoemaker | Ramo de flores: De Amor Chile | Traje del novio: Van Heusen | Zapatos novio: Guante | Fotografía y Video: Philip Mundy Fotografía / Eliott Esteban Film Maker | Decoración floral: Voilà | Carpa: Carpas Bellenger | Banquetería: Banquetera Probarte | Música y show: Avcorp Eventos | Cabina y Cotillón: Soy de papel | Recuerdos: Chocolatería BIR | Saxofonista: Jorge Manzano | Pantallas gigantes: Becaro |
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