Y una aventura está por empezar. Ya has decidido formar una vida junto a tu pareja, lo que sin duda resulta emocionante. Pero ahora una nueva etapa comienza: están esperando un bebé. La alegría inunda cada rincón de tu hogar, sin embargo puede que te preguntes cómo preparar la habitación del bebé para recibirlo de la mejor manera posible y hacerlo sentir cómodo. Son muchas las dudas que surgen y la lista de cosas para hacer te parece infinita, pero no te preocupes. A continuación podrás descubrir algunos consejos prácticos para transformar el espacio de tu bebé en una habitación funcional muy adorable y con mucho estilo.
Cómo elegir la habitación adecuada
Al elegir la habitación de tu bebé, lo más importante es asegurarte de que cuenta con las condiciones adecuadas. Primero, debe estar lo más cerca posible de los papás para que tengan acceso fácil a ella. Además debe contar con iluminación natural, una ventilación adecuada y con una temperatura cálida sin llegar a ser calurosa. En cuanto a las dimensiones, intenta que tenga el espacio suficiente para poder estar en ella con comodidad pero sin perder ese ambiente acogedor que necesita.
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La decoración
Los tonos suaves, como el verde claro, beige, rosado o azul pálido, son tu mejor aliado para decorar la habitación del bebé ya que son los que le ofrecen tranquilidad y calma. Deja los colores fuertes para cuando tu pequeño tenga más edad y así estimularás su creatividad e imaginación. Recuerda que este espacio no solo será su dormitorio, sino también el lugar de juegos, por lo que puedes agregarle interés visual poniendo vinilos decorativos. También son una buena opción los cuadros infantiles o fotos en las paredes, pero recuerda, es importante no sobrecargar el espacio: menos es más.
Los muebles y accesorios
Al colocar los muebles y accesorios, lo más recomendable es que utilices pocos elementos, es decir, solo lo necesario para el cuidado diario del bebé. Para los primeros meses de vida bastará con un lugar para cambiarlo, una cómoda, un closet, un sillón y la cuna. Debes asegurarte de que la cuna sea amplia, cómoda y segura porque ahí pasará la mayor parte de su tiempo al descansar. A medida que tu bebé crezca, podrás agregar más elementos dependiendo de sus necesidades y las tuyas.
La seguridad es fundamental
Mantener seguro a tu bebé siempre debe ser tu prioridad, y esto influirá al preparar su habitación. Es recomendable utilizar pinturas no tóxicas en las paredes y muebles, y sin son lavables, mucho mejor. Además, asegúrate de evitar a toda costa los objetos afilados, o esas cosas pequeñas que tu hijo podría llevarse a la boca. En cuanto al suelo, mantenerlo limpio es importante al momento en que el bebé empiece a gatear. Las alfombras de goma son una buena opción, ya que son blandas y lavables.
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Recuerda, cada pequeño tiene necesidades distintas, por lo que no hay nada escrito. Sigue tu instinto maternal y todo saldrá de maravillas en esta nueva y hermosa etapa de tu vida.
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