El trabajo es uno de los lugares en los que pasamos la mayor parte de nuestro día. En la mayoría de los casos, por lo menos, pasamos ocho horas en ese espacio que se convierte casi en el segundo hogar. Es por tanto natural que las relaciones se estrechen, especialmente cuando se tiene un buen ambiente de trabajo. La típica hora feliz tras un día pesado de trabajo en la oficina, propicia amistad con los compañeros y quizá un flechazo con un colega. En Zankyou, ya hemos cubierto varios matrimonios reales con historias de parejas que se conocieron en estas circunstancias.
Si alguna vez te enamoraste de alguien en el trabajo o conoces a alguien que ha vivido o está viviendo esta situación, habría que indicar que no todo es perfecto, pero también hay ventajas increíbles, “aunque estas ventajas vendrían determinadas por las manera en que cada individuo maneja la situación en cuanto a la diferenciación entre lo laboral y lo personal“, tal y como indica Juan Bohórquez, encargado de comunicación de Chile Psicólogos.
El amor está en el aire
Son muchos los expertos en psicología y en el comportamiento y la gestión de personas, que son categóricos al determinar que las relaciones amorosas en el lugar de trabajo son inevitables, sobre todo en la grandes empresas, donde el control es mucho más complicado.
Y es que “cuando el amor aparece es bien difícil retenerlo. Eso sí, lo mejor es siempre darse un espacio personal, puesto que al estar juntos en el trabajo y, luego, cuando se acaba el trabajo, volver a estar juntos” puede resultar totalmente agotador, tal y como expresa Josefina Honorato, directora del Centro Psicológico Reverie.
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Eso sí, “son muchas las empresas que tienen una política para intentar frenar el amor en el trabajo, o que, por lo menos, dicha relación conlleve un cuidado especial“, según palabras de Juan Bohórquez, de Chile Psicólogos.
Demostraciones de amor en el trabajo
Puede parecer obvio que muchas expresiones o muestras de cariño deberían estar prohibidas en el trabajo. En este punto, lo más importante es la moderación, ya que el exceso de muestras de amor puede mostrar una falta de profesionalidad y afectar a la intimidad de la pareja.
Una regla a recordar es que, en el trabajo, el respeto profesional debe ser lo primero, por lo tanto, los enamorados, dentro de la oficina o el centro de trabajo, deberían tratarse como simples compañeros. Eso sí, esto no quiere decir que esté prohibido el tener un almuerzo con tu pareja en el trabajo o sentarte en la misma mesa en cenas de empresa sino que se debe realizar de la forma correcta para que el ámbito laboral sea muy positivo para la pareja.
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Aislamiento de los compañeros
Para que la relación no interfiera en el clima de la empresa, lo mejor es que siempre se mantenga la interacción con otros compañeros de trabajo. Intentar evitar los cotilleos y los celos, será algo ideal para no poner en peligro el medio ambiente en el trabajo y en el hogar. Es por ello por lo que el diálogo entre la pareja es muy importante en este contexto.
Es primordial que mantengas la individualidad y hacer actividades sin la pareja, para así poder socializar con los compañeros. “No es recomendable evitar una relación con un compañero de trabajo porque sería ir en contra de la naturaleza del amor, que es un impulso vital, por lo que cualquier persona sana física y psicológicamente está preparada para comenzar una relación con un compañero de trabajo“, tal y como indican desde Chile Psicólogos, expertos en terapias de pareja.
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Exceso de convivencia
Como hemos indicado antes, el exceso de tiempo pasado juntos puede ser uno de los principales problemas a los que se enfrentan las parejas surgidas en el trabajo. Para que la relación no vaya menguando, lo mejor es que las caricias y las muestras de amor se hagan solo en casa, para que así la pasión no acabe muriendo.
Además, para que la convivencia sea perfecta, una premisa básica es que lo que sucede en la empresa se queda en la empresa. Es decir, no extrapoles los problemas laborales a casa. Asimismo, al igual que tienes que evitar hablar del trabajo fuera de él, no se lleven los problemas personales al ámbito laboral.
“Siempre es bueno mantener los espacios propios. Intentar, en lo posible, no trasladar los problemas personales entre ambos al trabajo y dejar eso hablado, tal vez están enojados y no se hablan pero en el trabajo el cuento es distinto, ya que estos comportamientos a la larga pueden derivar en despido“, según Josefina Honorato, del Centro Psicológico Reverie.
Me enamoré del jefe. ¿Y ahora qué?
Es muy común también que los empleados, en algún momento, se sientan enamorados del jefe. En este caso, “hay que pensarlo muy bien antes de implicarse con el jefe o jefa en caso de empleados y viceversa; preguntarse sinceramente: ¿estaré dispuesto a asumir todas las consecuencias que tal relación tendrá?“, según expresa el Responsable de Comunicación de Chile Psicólogos, Juan Bohórquez.
Normalmente, si acabas teniendo una relación con el jefe, tienes que saber que eso no significa que tengas que tener un sitio privilegiado en la empresa. “El jefe debe ejercer su rol superior y esto puede llevar a malos entendidos y discusiones en la pareja y también puede que el jefe o la jefa no sepa ejercer esa superioridad con su empleado enamorado y esto conlleve a problemas laborales si la pareja del jefe no cumple bien con su trabajo y su jefe-pareja no le dice nada“, aclara la directora del Centro Psicológico Reverie, Josefina Honorato.
El jefe o jefa, por lo tanto, debería saber diferenciar lo personal de lo profesional para así reafirmar su credibilidad y su actitud profesional, evitando así también problemas con el resto del equipo.
Los mejores consejos para poder llevar una relación con alguien del trabajo:
- Respetar las normas y valores de la compañía para hacer frente a la relación en el lugar de trabajo.
- Separar las cuestiones personales de los asuntos de trabajo, tanto dentro como fuera de la empresa.
- No dejar a un lado la creatividad para así no estancarse.
- Realizar actividades diferentes para que cada miembro de la pareja tenga su propio espacio.
- Evitar recursos de la empresa (mail, teléfono, etc.) para asuntos personales o mensajes íntimos con tu pareja.
- Si las relación es con el jefe o la jefa, tener en cuenta que las órdenes son laborales sin tomárselas como algo personal. Por el contrario, el jefe no debe tratar a su pareja con ningún tipo de privilegios diferentes a otros empleados.
Aunque no hay una receta mágica para las relaciones amorosas en el trabajo, seguro que estos consejos básicos ayudan a que la situación sea sobrellevada por ambos miembros de la pareja de la mejor forma posible.
Ahora que ya sabes todo sobre las relaciones en el trabajo, comprueba ¿Casarse o convivir? ¡Descubre por qué el matrimonio es mejor!
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